Los pobladores de aquel lugar cuentan que una
hechicera malvada y maldita llamada Alexandra, que vivía en un bosque de una
aldea de España, quiso hacer un hechizo para matar al rey Rubén, y así quedarse
con el trono. Su estrategia para matarlo
fue crear una paloma negra, que, al tocarla, el soberano moriría.
Fue a buscar al
bosque un sapo negro, una cucaracha azul
y un pelo “Guachitul”, un unicornio podrido. Cuando llegó a su choza, colocó
sus ingredientes en su olla preferida. Sus palabras mágicas fueron: “PATATÍN
PATATÁN, A RUBÉN VOY A MATAR, Y SU TRONO CONQUISTAR.”
Al día siguiente,
descubrió que el hechizo falló: su paloma “NEGRA” resultó ser blanca. Al ver
esto, dejó de un lado al ave y decidió revisar sus pasos hechos para encontrar
el error. Tras un par de horas, lo halló.
Al mismo tiempo,
la paloma fallida descubrió lo que Alexandra quería hacer con el rey y decidió
alertarlo. Mientras esto sucedía, Alexandra encontró su error y éste estaba en
las palabras mágicas…
La hechicera
volvió al bosque a buscar sus ingredientes y repitió su embrujo. La única
diferencia era la frase que debía decir: “TAPATÍN TAPATÁN A ESE MILLONARIO VOY
A MATAR…”
Al día siguiente, el embrujo fue
exitoso y así envió a la paloma negra a llevar un supuesto mensaje al rey, pero
al llegar descubrió que allí no se encontraba nadie…
Así, gracias a la
paloma blanca, el rey Rubén se salvó. En honor a la astuta avecilla que supo
comunicarle a tiempo los mensajes para evitar su muerte, los pobladores del
lugar decidieron llamarla “paloma mensajera”.
Escritoras:
VALENTINA
EYHERABIDE
LUCÍA
LEONE
MARTINA
RODRÍGUEZ
JEMIMA
ROCHA
ATENEA
VISCEGLIO
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